Nacida en México y con una década de aventuras en Barcelona, mi viaje ha sido una explosión de aprendizajes y descubrimientos. He entendido que las vivencias que a veces consideramos pesadas, momentos cruciales que nos han hecho mirar hacia adentro con un poco de incomodidad, son en realidad gemas de nuestro ser. Cada paso, cada viaje, cada risa y lágrima se convierten así en un legado que no solo nutre, sino que es un regalo celebrado.

En este camino de amor propio, he aprendido a acoger el misterio de mi historia como un faro de luz que invita a otros a buscar y celebrar el suyo.